THE HOME I NEVER KNEW: NI DE AQUÍ, NI DE ALLÁ

June 7 - November 1, 2024
Greenville Museum of Art | West Wing & Commons Galleries

Kenly Montes

“Even though my roots are in Mexico, I’ve lived in Newton Grove my whole life and started to love this small town.”

Un Pueblo Pequeño
2022
acrylic

ARTIST STATEMENT

I remember having a conversation with someone saying I can’t claim to be Mexican if I was born in America. Being first-generation, with Mexican immigrant parents, that statement hit hard. I’ve always expressed myself as Mexican, as a proud Latina. I know that not everyone will view me that way. I won’t always view myself that way because, in part, NC is what I grew accustomed to. Spanish was my first language. It was what I knew growing up. My parents never failed to bring their home to us. So I knew all the time growing up that I was Mexican. When I visited Mexico for the first time in 2018, I felt too Americanized. The people recognized right away I was from “El Norte.” At that moment, I felt less Mexican. I never was ashamed of being who I was. I remember being younger and telling myself I’d play soccer for El Tri one day. Now I’m in the country I always knew about and I felt like an outsider. And when I returned to the States, I also felt like an outsider. Going into higher education, and going into spaces where I was 1 of 3 women, and the only Latina, made me feel like I wasn’t supposed to be there. The doll in the painting is one I bought from a small local shop in Altamirano, Guerrero. I saw a little of me in her. I don’t have to make myself different to fit in. I just have to be myself. Although I was born here, l exist in this borderland between NC, Zacatecas, and Guerrero. Home is where I have all three, and I learned to have all three in this small town called Newton Grove.

DECLARACIÓN DEL ARTISTA

Recuerdo tener una conversación con alguien que decía que no puedo decir que soy mexicana si nací en Estados Unidos. Al ser primera generación, con padres inmigrantes mexicanos, esa afirmación me afectó mucho. Siempre me he expresado como mexicana, orgullosa de ser latina. Sé que no toda la gente me va a ver de esa forma. No me voy a ver siempre así porque, en parte, Carolina del Norte es a lo que me he acostumbrado. El español fue mi primer idioma, era lo que sabía al crecer. Mis padres nunca dejaron de traernos su hogar. Así que todo el tiempo mientras crecía sabía que era mexicana. Cuando fui a México la primera vez en 2018, me sentí demasiado americanizada. La gente de inmediato reconoció que yo era “del Norte”. En ese momento, me sentí menos mexicana. Nunca me avergoncé de ser quien era. Recuerdo ser más joven y decirme que algún día jugaría para El Tri. Ahora, estoy en el país del que siempre supe y me sentí como forastera, y cuando regresé a los Estados Unidos, también me sentí como forastera. El ir a la escuela de educación superior y a espacios en los que era una de tres mujeres, y la única latina, me hizo sentir como que no debía estar ahí. La muñeca en el cuadro es una que compré en una pequeña tienda en Altamirano, Guerrero. Vi un poco de mí en ella. No tengo que ser diferente para encajar, solo tengo que ser yo. Aunque nací aquí, existo en esta tierra fronteriza entre Carolina del Norte, Zacatecas, y Guerrero. Mi hogar es cuando tengo los tres, y aprendí a tenerlos en esta pequeña ciudad llamada Newton Grove.

INTERVIEW WITH THE ARTIST | ENTREVISTA CON LA ARTISTA